martes, 20 de mayo de 2008

Grasas trans y cáncer de mama

Algunas clases de grasas, especialmente las saturadas y las grasas trans, pueden acrecentar el riesgo de enfermedades del corazón.

Gracias a la amabilidad de la Dra.Véronique Chajés, del Instituto Gustave Roussy en Villejuif, Francia, y a solicitud nuestra, recibimos hace pocos días el resultado de una importante y comentada investigación desarrollada en ese centro, la cual suma evidencias a la asociación entre el consumo de alimentos que contienen grasas trans y el cáncer de mama.

En esta misma sección publicamos hace pocas semanas un artículo, Muy alertas con las grasas trans, donde hablábamos de los alimentos ricos en grasas trans, entre los que se encuentra la margarina, los dulces, los panecillos, las galletas, las papas fritas, etc., contenedores de este tipo de grasa procedente de aceites vegetales. Al ser procesados por la industria que solidifica el producto, adquieren otra configuración química nociva a la salud.

La Dra.Chajés y su equipo de trabajo han participado en una investigación europea sobre cáncer y nutrición, dentro de un estudio prospectivo que analiza los factores de riesgo de cáncer relacionados a costumbres dietéticas, de estilos de vida y factores reproductivos en la mujer entre los años 1989 y 2002.

En su momento, las grasas trans fueron consideradas como el sustituto ideal de las grasas saturadas como la manteca y demás grasas animales que favorecen la progresiva obstrucción de las arterias. Hoy se conoce que son igualmente perjudiciales y cada día se confirman, como en esta investigación, nuevas afectaciones a la salud.

En el estudio fueron seleccionados 363 casos que desarrollaron cáncer de mama en un grupo de 19,934 mujeres francesas. Se analizaron sus hábitos nutricionales por encuestas, método propenso a conclusiones no exactas. Pero también se le tomaron muestras de sangre y se precisaron determinados marcadores biológicos o biomarcadores en el suero, el plasma y la membrana de los glóbulos rojos, informantes seguros del tiempo promedio transcurrido de la ingestión de diferentes tipos de grasas en días, semanas e incluso años.

De manera objetiva ellos ofrecen una mayor confiabilidad en la determinación de estos nutrientes independientemente de la fuente alimentaria de donde provengan. Comparadas con casos de control se encontraron evidencias que aquellas con mayores niveles de grasas trans (ácidos palmitoleico y elaidico), tenían mayores riesgos (del 50 al 200%) de sufrir cáncer mamario cuando se comparaban con las de niveles inferiores.

El ácido elaidico es el que aparecía con mayor frecuencia en alimentos industriales como los emparedados, galletas, pizzas, cakes y pastelería que se comercializaron en Francia en l995-l996 y en l999.

Finalmente, solo resta felicitar a la Dra. Chajés y a su equipo de trabajo por tan valiosa investigación publicada en la revista American Journal of Epidemiology, 4 de abril del 2008, pues su aporte ha permitido que hagamos esta breve reseña de tanta importancia para nuestra población.

* Profesor de Medicina y Jefe del Servicio de Endocrinología
Hospital Docente "Dr. Salvador Allende"
Municipio Cerro, Ciudad de la Habana
E. mail:
alberto.quirantes@infomed.sld.cu

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Fuente: EXCLUSIVO,
10/05/08



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AHANAOA A. C.
Lic. Nut. Miguel Leopoldo Alvarado
http://www.nutriologiaortomolecular.org/
http://www.seattlees.com/

Suiza limita a un 2% el contenido de ácidos grasos 'trans' en los alimentos - Industria

Suiza limita a un 2% el contenido de ácidos grasos 'trans' en los alimentos - Industria

ICEX

05. Mayo ´08 - Un estudio de la Escuela Politécnica Federal de Zürich llama la atención sobre los ácidos grasos 'trans' (tipo de ácido graso insaturado que se encuentra principalmente en alimentos industrializados que han sido sometidos a hidrogenación o al horneado). Así, de 120 productos alimenticios, un tercio sobrepasaba los valores máximos de dichos ácidos grasos.

A este respecto, Dinamarca fue el único país de Europa que, durante 2007, estableció un límite legal sobre el contenido de estas grasas en los alimentos. A raíz de dicha circunstancia, Suiza ha desarrollado una nueva normativa que limita a un 2% (como ocurre en Dinamarca) la tasa de ácidos grasos 'trans' sobre el total de materias grasas contenidas en los aceites vegetales. Esta normativa entró en vigor el 1 de abril de 2008.

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AHANAOA A. C.
Lic. Nut. Miguel Leopoldo Alvarado
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sábado, 3 de mayo de 2008

Acidos Grasos Trans: Concepto e Implicancias Clínicas

Acidos Grasos Trans: Concepto e Implicancias Clínicas
Marcelo Tavella, Luis Perego, Graciela Peterson, Marcelo Espeche y Silvia Marteau.

PROPIA (Programa de Prevención del Infarto en Argentina)
Universidad Nacional de La Plata.
Comisión de Investigaciones Científicas de la Pcia. de Buenos Aires.

INIBIOLP (Instituto de Investigaciones Bioquímicas de La Plata)
Universidad Nacional de La Plata
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas

Facultad de Ciencias Medicas
Calles 60 y 120 1900 La Plata. Argentina
E-mail : mtavella@speedy.com.ar
E-mail : jtavella@atlas.med.unlp.edu.ar
URL : www.propia.org.ar
Tel: (0221) 4240293
Fax: (0221) 4535577



Introducción:

      La incidencia de la aterosclerosis coronaria varía ampliamente entre diferentes poblaciones. Cuando estas poblaciones migran desde un país de baja incidencia a uno de alta, su suceptibilidad a la enfermedad coronaria aumenta, hasta acercarse a los valores de la nueva población. Esta evidencia sugiere fuertemente, que los factores ambientales más que los genéticos, son los responsables del aumento de frecuencia de enfermedad coronaria prematura (1).

      La dieta es de los factores ambientales, uno de los mejores definidos. Además de los efectos sobre los lípidos sanguíneos y el peso corporal, la dieta puede promover o inhibir la aterosclerosis a través de su efecto sobre la presión arterial y la coagulación sanguínea. Sin embargo, la vinculación con los cambios de las concentraciones de lipoproteínas plasmáticas es la que posee mas fuerte evidencia (2) (3).

      Las grasas de la dieta están representadas fundamentalmente por los triacilglicéridos. El número, la localización y la geometría de las dobles ligaduras de los tres ácidos grasos que esterifican al glicerol, tienen un profundo efecto sobre los niveles de lípidos plasmáticos (4).

      En la alimentación se incorporan tres tipos de ácidos grasos: saturados, monoinsaturados y polinosaturados. A éstos debemos agregar un cuarto grupo que ha concentrado la atención de investigadores y que han demostrado poseer efecto sobre la colesterolemia y el metabolismo celular: los isómeros trans de los ácidos grasos (AGT).

      En términos generales los ácidos grasos saturados dietarios producen aumentos de la colesterolemia, en tanto que aquellos con uno o más dobles enlaces (configuración cis), ejercen el efecto opuesto. (4) Respecto de los isómeros trans de los ácidos grasos, a pesar de ser insaturados, tienen efecto similar a la de los ácidos grasos saturados (5).

      A nivel del metabolismo celular estos ácidos producen variadas modificaciones en la actividad de enzimas, en particular aquellas vinculadas con el metabolismo de los ácidos grasos esenciales y eicosanoides (6).

      Es objetivo de esta revisión, presentar la evidencia disponible a la fecha, sobre los diferentes aspectos de los isómeros trans de los ácidos grasos. Definición, síntesis, fuentes, metabolismo e implicancias clínicas, serán analizadas en detalle en esta revisión.


Definición

      Cómo ácidos grasos, agrupamos a los ácidos carboxílicos que contienen desde 4 átomos de carbono con una sola función ácido.

CH3 - (CH2)n - COOH

Donde n representa el número de grupos etileno.

      Las cadenas de los ácidos grasos pueden ser saturadas, cuando contienen la máxima cantidad de átomos de hidrógeno unidos a los átomos de carbono, ó insaturados, en caso que existan enlaces dobles ó triples entre los átomos de carbono, lo cual disminuye la cantidad de H que dichos átomos son capaces de ligar.

      Los dobles enlaces entre los átomos de carbono pueden tener distintas configuraciones según la orientación espacial de los átomos de H enlazados a estos carbonos. Estas configuraciones son las llamadas Cis o Trans, de acuerdo a que los dos átomos de H estén del mismo lado ó de lados opuestos al plano delimitado por el doble enlace C = C.



      Existen distintas nomenclaturas para los ácidos grasos: 1) Trivial, con nombres derivados de las fuentes naturales de obtención de los mismos. 2) IUPAQ o química, que indica en forma taquigráfica el número de átomos de carbono, el número de insaturaciones, su posición en la cadena y el tipo de configuración de las mismas. 3) Omega o metabólica, en base a la cual se pueden clasificar las familias de ácidos grasos según sea su precursor de síntesis.

      En la tabla 1 se dan algunos ejemplos de ácidos grasos, y en la figura 1 se explica detalladamente la nomenclatura sobre la formula de un ácido graso, el palmitoleico de 16 átomos de carbono, con una sola insaturacion de configuracion cis.


Síntesis

a) Biológica.

      Los ácidos grasos, tanto saturados como insaturados de origen animal y vegetal tienen un número par de átomos de carbono, y la configuración en el caso de los insaturados corresponde a cis.

      La síntesis de ácidos grasos de cadena larga en animales, se realiza por mecanismos llamados de elongación y desaturación.

      Los seres humanos no pueden sintetizar algunos de los ácidos grasos, que reciben el nombre de esenciales, son el ácido linoleico y linolénico. Estos tienen importancia, per sé y por ser precursores de ácidos de cadena más larga que tienen importantes funciones biológicas, por ejemplo el ácido araquidónico que es precursor de prostaglandinas, leucotrienos y tromboxanos (Eicosanoides).

      En el rúmen de los animales poligástricos (rumiantes como vaca y oveja) se produce un gran número de modificaciones químicas de los ácidos grasos como biohidrogenación, isomerización e hidroxilación. Durante el transcurso de los dos primeros, se producen isómeros Trans, que posteriomente formarán parte de los lípidos del animal y se encontrarán así en su carne, grasa y leche.

      Estos procesos justificarían la escasez de ácidos grasos esenciales en los lípidos de los rumiantes.

b) Industrial.

      La industria modifica los ácidos grasos contenidos en los triacilglicéridos naturales durante los procesos de extracción y purificación de los mismos, como un efecto secundario al proceso. Estos producen transformaciones indeseables que alteran las propiedades biológicas y químicas de dichos triacilglicéridos. Una de las más importantes alteraciones es la transformación de los ácidos grasos Cis a Trans, fenómeno que también ocurre durante el proceso térmico de la elaboración de los alimentos.

      La sensibilidad de los aceites vegetales ante el tratamiento térmico varía notablemente con la composición en ácidos grasos de los mismos. Así, en el aceite de girasol (86% insaturados) el calentamiento a 240º C (temperatura de fritura) durante 2hs, produce 5% de isómeros Trans, mientras que en el aceite de palma (50 % insaturados), el mismo tratamiento produce 0.3 % de estos isómeros (7).

      La industria utiliza tecnología especializada para alterar la composición en ácidos grasos de los aceites vegetales para así modificar su fluidez y estabilidad ante la oxidación. El proceso de hidrogenación puede ser : 1-Selectivo (sobre un ácido graso en particular) por ejemplo para reducir el contenido en ácido linolénico (3 dobles enlaces) y aumentar de esta manera la estabilidad ante la oxidación del aceite, como se realiza sobre el aceite de soja. 2- Total o parcial que tiene por objetivo la obtención de grasas sólidas, base de la fabricación de margarinas y shortenings (grasas emulsionables). (7) Durante la hidrogenación parcial se producen aproximadamente 40% de isómeros Trans. Dada la importante cantidad de AGT que se producen en la hidrogenación de los aceites vegetales, es necesario tomar en cuenta su presencia en los alimentos cuando se trata de elaborar una dieta tendiente a controlar la colesteronemia: galletitas dulces y saladas, panes industrializados en rebanadas, tanto blancos como integrales, así como un sin número de golosinas, contienen en su composición aceite vegetal hidrogenado.


Metodología utilizada para el análisis de ácidos grasos Trans

      Para la cuantificación del contenido de cada tipo de ácido graso en una muestra, ya sea un alimento o un tejido animal, vegetal o humano es necesario en primer término aislar los lípidos del resto de los componentes de la muestra (proteínas, glúcidos y agua), utilizando la diferencia de solubilidad en mezclas de solventes no polares que los caracteriza (8). Una vez aislados estos lípidos que son triacilglicéridos, fosfolípidos, colesterol libre y esterificado, deben separarse entre sí utilizando cromatografía en capa delgada (9). Por último la cuantificación propiamente dicha se realiza por cromatografía gas-líquido (10).


Fuentes alimentarias de los ácidos grasos trans (AGT)

      La fuente mas común de AGT son las margarinas, los "shortenings" así como su larga lista de derivados, como galletitas, tortas, panes lactales, alfajores, etc. (11) Todos ellos contienen aceites vegetales parcialmente hidrogenados. También la leche, sus derivados y la carne de rumiantes contienen estos ácidos. (12) (13)

      Los AGT representan en promedio el 5 % del total de los ácidos grasos de aquellos productos derivados de las vacas y las ovejas, en tanto que los AGT generados por la industria al hidrogenar aceites vegetales, puede representar hasta mas del 50 %. (14)(15)(16)

      Las estimaciones sobre el consumo de AGT es controversial, dependiendo fundamentalmente de la metodología utilizada para su evaluación (15) (17) (18). El promedio de consumo en USA se ha calculado en 7 a 8 gramos diarios (19). Otros autores consideran es de 13.3 g/dia (20). En Alemania el consumo es de 3.4 g/día para las mujeres y 4.1 g/día para los hombres (21). En la población de Escocia se ha determinado que es de 7 g/día. (15) En tanto que España posee uno de los valores mas bajos, con 2.4 g/día. (22)

      En los lactantes es posible encontrar cantidades variables de AGT en sus fosfolípidos plasmáticos. Desde que se ha demostrado que los AGT atraviesan la barrera placentaria y que se encuentran en la leche materna, estas fuentes deben ser consideradas, especialmente si la embarazada o madre lactante esta consumiendo alimentos ricos en AGT. (23). (24) (25) (26)


Efectos metabólicos de los AGT

      Desde la década de los ´80 al presente, numerosos trabajos de investigación se han realizado con el propósito de conocer el posible efecto de los isómeros trans de los ácidos grasos mono y polietilenicos sobre el metabolismo celular.

      Ratas (27), conejos (28), cerdos (29) y también seres humanos (30), han sido motivo de estudio. Células miocárdicas (31), de la corteza adrenal (32), hepatocitos (33), adipocitos (34), plaquetas (35) y fibroblastos (36) han sido utilizados para evaluar el posible impacto sobre distintos procesos celulares como: glucólisis (34), biosíntesis de ácidos grasos (37), oxidación (38), desaturación (39), cetogénesis (40), absorción intestinal de colesterol (41), síntesis de colesterol (42), síntesis de receptor B-E (43), ciclo de Krebs (28).

      El aporte de AGT, ya sea por la dieta o a través de incubaciones celulares o subcelulares produce en distintos grados su incorporación en fosfolípidos, triacilglicéridos y ésteres de colesterol, desplazando a los isómeros cis. (44) (33) Cuando estos lípidos están formando parte de membranas, estas se modifican, alterando así sus múltiples funciones.

      Cuando la incorporación de trans dietilénicos se produce en fosfatidil colina, se genera una disminución de ácidos esenciales indispensables para la normal síntesis de eicosanoides.

      Es importante destacar el hallazgo de Zavenbergen, quien demostró que cuando a ratas alimentadas con altas cantidades de AGT, se le incrementaba el aporte de ácido linoleico, se prevenía el efecto inhibitorio de la síntesis de eicosanoides (45).

      Algunas de las alteraciones de procesos metabólicos que han podido demostrarse por aporte de AGT son: disminución de la función mitocondrial, inhibición de la glucólisis y estimulación de la lipogenesis en adipocitos, alteración de los receptores LDL, estímulo de la agregación plaquetaria, aumento de la cetogénesis, inhibición del metabolismo de los PUFA (por inhibición de la 6 y 5 desaturasas), aumento en la síntesis de colesterol.

      En humanos es posible encontrar depósitos de AGT en tejidos, como adipocitos (46) y miocardio (47). Las concentraciones halladas se correlacionan directamente con su consumo , como así también a la presencia de lesiones ateroscleróticas objetivadas por angiografía (48). Respecto a la aterogénesis, las dietas ricas en AGT producen aumento de las concentraciones plasmáticas de LDL, Colesterol , Apolipoproteína B y Lipoproteína (a) y una disminución, menos constante, de HDL y Apolipoproteína AI. (5).

      El estudio Seven Countries Study , en el cual 12763 hombres representando a 7 países fueron seguidos durante 25 años, demostró inequívocamente que el porcentaje de ácidos grasos saturados como de AGT contenidos en la dieta correlaciona fuertemente con la concentración de colesterol en el plasma de una población.(49)


Implicancias Clínicas

      Considerada hasta aquí la evidencia obtenida de investigaciones realizadas sobre las alteraciones del metabolismo producidas por los AGT, es posible plantear una lógica precaución al consumo de dietas ricas en dichos ácidos. Sus efectos deletéreos serían aún peores en aquellas poblaciones que consumen bajas cantidades de ácidos grasos esenciales.

      La falta de standarizacion en la medición de los AGT, con la consiguiente dificultad para comparar información, y el gran número de isómeros trans, algunos con efectos opuestos, han llevado a la moderación a la hora de proponer medidas destinadas a la población.(50)

      Sin embargo, la franca tendencia hacia la aterogénesis observada con el aporte de AGT en la dieta, llevo a la World Health Organization (WHO) y a la Food and Agriculture Organization (FAO) a generar un reporte de expertos, cuyo párrafos mas importantes plantean: (51)

* Los consumidores deben sustituir grasa por aceite, para así reducir el consumo de ácidos grasos saturados y trans.

* Los Industriales de la alimentación deben reducir los niveles de trans generados por la hidrogenación.

* Los gobiernos deben monitotear los niveles de ácidos grasos trans en los alimentos grasos.

* Los gobiernos deben limitar los anuncios sobre alimentos ricos en ácidos saturados y ácidos grasos trans, y no debe permitir que aquellos alimentos ricos en trans lleven leyendas que indiquen poseer bajas cantidades de saturados.


Conclusiones

      El infarto y el accidente cerebrovascular causan el 25 por ciento de las muertes que se producen en el mundo, cobrando alrededor de 12 millones de vidas por año (52). El mayor porcentaje de las víctimas tienen menos de 65 años. En vista del aumento actual de la esperanza de vida, estas muertes deberán ser consideradas como prematuras.

      Hoy en día, la perspectiva es distinta, a medida que los países en desarrollo se van modernizando, que logran controlar las enfermedades transmisibles y que la esperanza de vida de sus poblaciones aumenta, también aumenta la prevalencia de éstas. Su tasa está disminuyendo en países industrializados, especialmente en Europa occidental y América del Norte, así como en Australia y Nueva Zelanda, donde se ha comprobado que pueden evitarse a través de cambios en el hábito de vida (educación en los hábitos alimentarios, actividad física regular y aeróbica y abstención en el hábito de fumar). (53) (54).

      La Argentina ocupa el 4to lugar en América en la tasa de mortalidad por enfermedades cardiovasculares (52).

      Surge de lo expuesto la importancia de iniciar rápidamente políticas sanitarias orientadas a controlar la aterosclerosis en nuestro país. Las mismas deben estar necesariamente sustentadas sobre un conocimiento profundo de las características o condiciones particulares a la que nuestra población se encuentra sometida. En tal sentido la Universidad Nacional de La Plata a través del PROPIA (Programa de Prevención del Infarto en Argentina) ha iniciado un estudio sistemático de la composición en ácidos grasos (incluso saturados e insaturados Trans) de los principales alimentos grasos consumidos en nuestro medio.

      Sólo instalando el tema en la comunidad médica primero, y con los resultados, en la población general después, podremos iniciar una intervención efectiva sobre nuestros cuestionados hábitos alimentarios.

Agradecimientos:
Los autores agradecen a la Srta. Daniela Ardohain por su colaboración en la preparación del manuscrito.





Figura 1. Fórmula desarrollada del ácido palmitoleico



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Fecha última actualización: 30-09-2003 Volver atrás



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